El gobierno del Presidente electo Yamandu Orsi parece tener una impronta muy marcada, que es la búsqueda de un proyecto nacional y terminar o aminorar la grieta política fomentada por una parte muy importante de la derecha uruguaya. No es un objetivo caprichoso, sino que ha sido una actitud constante de la dirección del Frente Amplio en su conjunto desde la derrota de 2019 y un accionar político de Orsi muy coherente en toda su trayectoria política.
El colonialismo mental sigue en pie
Los países con origen colonial tienen una doble, triple, múltiple carga para deslastrarse. Fijémonos en los países sudamericanos (y dejemos por un instante al margen las otrora llamadas Guayanas, cuyo proceso poblacional es todavía más enrevesado).
Columnas01/08/2023 Luis E. Sabini FernándezColonialistas ibéricos, del extremo oriental de Europa, se posesionaron por orden divina, y terrenal del Papa, de estas vastas tierras con sus pobladores incluidos. Pobladores no europeos ni cristianos y por lo tanto tratados como enseres.
Lo primero que sobrevino fue una merma poblacional brutal (entre los “indios”, claro). No sólo mediante matanzas, a las cuales los colonizadores fueron muy propensos, sino también producidas por el choque intercultural y las diferencias entre los respectivos microorganismos de recién llegados con los asentados endémicamente en el continente y su población.
Los ibéricos que en los siglos xvi, xvii y xviii despojaron todo lo (poco) que pudieron robando para la Corona, fueron reconfigurándose. Se forjaron sociedades de criollos. Para todos los gustos; hubo quienes se mantuvieron apegados al origen transatlántico y otro caudal en constante crecimiento fue generándose con conciencia americana. Un tercer sector, menor pero muy movilizado, había empezado a sentir la importancia de otros centros imperiales, como el francés, pero sobre todo el inglés. Y con el paso de las décadas, con la emancipación de EE.UU. respecto de su raíz anglo, los mismos EE.UU. pasaron a ser también otro referente para muchos criollos del sur.
Artigas, por ejemplo, conocerá ideas federalistas, que tendrán mucho que ver con su estrategia política, la Liga Federal, conectando políticamente a la Banda Oriental, la Mesopotamia y Santa Fe. También llegarán al Plata las nuevas ideas políticas con la Revolución Francesa de 1789 y todo ello hará que muchos políticos platenses vayan sustituyendo ideas de representación mediante estamentos o corporaciones, de impronta medieval, por el voto directo y personal, individual, característico de lo que llamamos modernización.
La sociedad colonial establece grandes diferencias de valor y significación social para sus habitantes. Mucho trabajo esclavo, por ejemplo.
¿Cuándo empieza a surgir un espíritu de resistencia, de incomodidad ante el poder establecido en las capas “importantes” de nuestras sociedades coloniales, entre los blancos europeos o criollos? Será ante el descalabro de la corona española, por ejemplo, con la invasión napoleónica de 1808. Desde entonces, irá creciendo un desasosiego americano (las rebeliones de las naciones aborígenes vienen desde mucho antes, desde siempre, y en general, no se plegarán a los movimientos rebeldes de los blancos europeos) que aumenta su intensidad a partir de 1810.
Lo característico de la rebelión sudamericana desde 1810, fogoneada inicialmente desde Buenos Aires, es que será contra el poder opresor extranjero y remoto, pero sin la menor consideración hacia capas sociales al margen de los núcleos dirigentes. Convertida en revolución, permanecerá como revolución de minoría propiamente dicha, “y a mucha honra”.
Eso distingue los pujos revolucionarios sudamericanos de los habidos en otras sociedades más o menos simultáneas, o incluso anteriores, donde se apostara por cierto igualitarismo, por cierto universalismo. La marejada revolucionaria sudamericana de 1810 llegará, por ejemplo, a la libertad de vientres; es decir a una legalidad nueva donde no se nazca esclavo. Pero los esclavos permanecerán tales (reasegurando que la esclavitud se extinguirá tras décadas…), sin alterar las expectativas materiales de los actuales esclavistas.
Uno de los escasísimos documentos del período revolucionario sudamericano, que bregará por cierto igualitarismo, atención a los más necesitados, será el Reglamento de Tierras encarado por Artigas; “Reglamento Provisorio de la Provincia Oriental para el Fomento de la Campaña y Seguridad de sus hacendados”, “para que los más infelices sean los más privilegiados”: “los negros libres, los zambos de igual clase, los indios y los criollos pobres, todos podrán ser agraciados con suertes de estancia si con su trabajo y hombría de bien propenden a su felicidad y a la de la Provincia. Serán igualmente agraciadas las viudas pobres si tuvieren hijos y serán igualmente preferidos los casados a los americanos solteros y estos a cualquier extranjero”.
Puesto en práctica a mediados de 1815, valiéndose de tierras “realengas” o expropiadas “a malos europeos y peores americanos”, esa reforma agraria se truncó en medio de las guerras intestinas que caracterizó el período en que Artigas y el federalismo enfrentó al Directorio porteño. Su efecto, empero, se hizo sentir, pues consta que al menos durante el resto de todo ese siglo XIX los dueños despojados de tales tierras, procuraron, con ejércitos de abogados a su servicio, recuperar aquellas “suertes de estancia”, y así restablecer el latifundio tal cual lo había gestado la sociedad blanca privilegiada hasta 1810, sobre todo a costa de los territorios arrebatados a los naturales de la Banda Oriental (igual que en Argentina tras la “Conquista del Desierto”, 1879).
Podríamos enunciar que el levantamiento criollo contra la Corona (en rigor fue contra la corona española usurpada por Bonaparte que quiso instaurar otra corona, ésa sí claramente rechazada por los españoles, tanto los peninsulares como los indianos), no tuvo ninguna perspectiva, digamos solidaria; era el levantamiento de un grupo social privilegiado que veía en peligro sus privilegios y se jugó a mantenerlos (y aumentarlos con mejores socios, como Inglaterra en lugar de España).
Eso explica que en los nuevos países americanos, como Argentina (y poco después Uruguay), el latifundio haya sido piedra basal de la estructura de propiedad. Sostenido, además, con una absolutización del “sagrado de la propiedad privada” que no existe ni siquiera en las sociedades capitalistas europeas.
Los levantamientos y la gesta independentista en estas tierras no tienen parentesco alguno con levantamientos obreros o campesinos, por ejemplo en Europa en los siglos xviii o xix, luchando por la igualdad (Babeuf, levellers, ludditas).
Está nítido el motivo: éstas últimas son rebeliones contra opresiones generadas desde el privilegio; lo que sobreviene en Buenos Aires, y en general en las colonias sudamericanas que irán logrando la independencia, es una lucha de privilegiados para mantener privilegios, pero administrándolos.
Una oligarquía ya más americana que hispana, entrará en rebeldía para adueñarse del poder económico (y consecuentemente político pero sin intención alguna de compartir ese poder con sectores de la sociedad ajenos al poder de la gente “como uno”, “decente”. Asì, la independencia consolidará el poder económico ya establecido y lo reafirmará, consolidando el latifundio.
Y aquellas aguas traerán estos lodos. Dos ejemplos, bien recientes: el trigo transgénico y el INTA ante el programa SPRINT.
1. EL TRIGO TRANSGÉNICO ABARATA ENVENENANDO
Alrededor del 2000 por la polémica desatada con la expansión de los alimentos transgénicos, los grandes consorcios que los impulsaban; Monsanto, Bayer, Syngenta, se avinieron a una demanda social que ganó mucho espacio cultural entonces resistiendo la técnica transgénica en franca ofensiva. Se llegó entonces a una suerte de descansillo; se aceptó como hechos consumados soja y maíz transgénicos, pero a la vez se logró el compromiso de tales consorcios de no iniciar la producción de trigo y arroz transgénicos. No se logró ningún acuerdo formal, apenas una concesión oral ante las organizaciones campesinas internacionales, como Vía Campesina, el MST brasileño, la Conféderation Paysanne de Francia y diversas organizaciones rurales asiáticas. Apenas una tregua.
Esa especie de status quo fue repentinamente violado por dos países, llamativamente próximos entre sí: Uruguay y Argentina. En el mismo año, 2020, sus autoridades, digamos nacionales, proclaman la puesta a punto de trigos transgénicos (con cualidades transgénicas vinculadas a la tolerancia a diversos biocidas, como el glufosinato de amonio). Los veinte años no habían pasado en vano. Los consorcios transgénicos y sus laderos dan el golpe sorpresa y “se la llevan toda”.
2. INTA ANTE EL PROGRAMA SPRINT
En el marco de la FAO, es decir de la ONU, hace unos años se generó una entente con representación de varios estados europeos más la Argentina, dedicada al mapeo de los agrotóxicos entre los consumidores de los alimentos resultantes de la producción industrial y masiva.
Objetivo delicado si lo hay, esto de que organizaciones y redes transnacionales dedicadas a la modernización de la agricultura alcancen una instancia crítica observando el fruto de su propio accionar. El proyecto generado, SPRINT, parece haber dado por resuelto que la verdad es más importante que la protección de intereses creados, puntos de vista, preceptos de trabajo.
SPRINT encaró, por ejemplo, el mapeo humano en los pueblos fumigados de la provincia de Buenos Aires, y entonces estalló el cortocircuito: INTA no aprueba ese estudio y le quita todo auspicio. Es curioso ver el miedo pavoroso ante la verdad, en el mismísimo campo de la hipermodernidad agropecuaria. El INTA borra una reunión en junio 2023, programada para conocer dicha investigación, y el 5 de julio el INTA suspende el capítulo argentino del proyecto SPRINT ¡e inicia un sumario contra sus responsables!
El motivo resulta peculiar: según Naturaleza.ar, INTA no habría advertido que las investigaciones iban a llegar a ponderar el alcance que los agrotóxicos tienen en seres humanos. Argumentación bizarra, por decir lo menos, considerando que Argentina, junto con EE.UU., son los primeros y únicos dos países del mundo que iniciaron los cultivos transgénicos en el siglo XX. Y que Argentina conoció el estremecedor testimonio del formidable fotógrafo Pablo Piovano, que recorriera hace unos años “el país de la soja” registrando el daño de los agrotóxicos en los seres humanos.
Vale la pena reparar cómo se ha generado conflicto desde una instancia de evaluación que pertenece por entero a la modernización hipertecnologizada, que se ha desentendido de consecuencias no deseadas pero insoslayables, provenientes de una política empeñada en producir con prescindencia de toda consideración sanitaria.
El latifundio que hace dos siglos desechaba “negros” y “marrones”; desecha ahora niños pobres de los pueblos de provincia.
Es llamativo que no se hayan rastreado los motivos del aumento desproporcionado de escuelas diferenciales, por ejemplo en Misiones, para niños “con capacidades diferentes” (Trastorno del Espectro Autista (TEA) y Trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH).
Tendríamos que decir basta a conspiraciones de silencio. Pero sabemos que no es nada fácil. Porque “los que tienen la vaca atada” cuentan con la ignorancia generalizada, la dificultad para rastrear causas y la confianza por inercia hacia lo que “las autoridades” afirman.
Pero, como decía Mario Benedetti, “el abajo se mueve”.
El concepto del título puede tener muy variables significados, materiales, espirituales, pero estas líneas van a discurrir exclusivamente en el plano físico; vinculado con nuestros cuerpos (aunque no exclusivamente; ya sabemos todo es uno).
El penoso papel de picador que se usaba en el toreo, que el director del semanario Voces se ha atribuido para iniciar los ataques a Gustavo Salle, −“Este año tenemos a un bufón con megáfono que va a hablar de todo un poco…”− ingresado al ámbito parlamentario, deja ver los recursos de que se van a valer para quitar del medio al recién ungido parlamentario.
Desde finales del siglo XX, el concepto de comunicación estratégica ha estado presente a lo largo de la historia llegando a obtener con el tiempo un papel relevante en las distintas guerras, desde la Primera Guerra Mundial hasta el final de la Guerra Fría.
Tal vez demostrando cierta predisposición a la solidaridad, a la piedad, a la justicia, muchas personas y de muy variado origen y situación condenan las atrocidades con que Israel, su gobierno y dirección política y religiosa –con enorme apoyo popular–, llevan a adelante la masacre del pueblo palestino.
Se dice, desde hace mucho tiempo, que el gran problema del Frente Amplio es que vota mal en el Interior. Se dijo, se dice, se repite y se vuelve a decir. Es una “cantarola” que aburre. Pero, ¿será verdad que pasan los años y todo sigue igual?
Uruguay ante el genocidio ISRAELÍ cada vez más “a la vista deL PÚBLICO”
Es sumamente penoso ver el grado de abdicación y sumisión mental (no sabemos si también material, pero con el primero ya tenemos motivos de preocupación) de los referentes y líderes de todo el espectro político principal de nuestro país
Si usted quiere saber dónde ganó, por cuanto, cómo o lo que sea, ya fuese Orsi, Cosse o Lima, cuáles fueron las 10 mejores, las 5 peores listas o algo por el estilo no pierda tiempo. Deje de leer porque de esos temas no vamos a decir nada. Levantemos la mira: hablemos del Frente Amplio que es la única esperanza del pueblo uruguayo para lograr su bienestar.
En América Latina, el crecimiento económico ha sido históricamente presentado como la panacea para los males sociales de la región. Los indicadores macroeconómicos, como el PIB, la inversión extranjera y las exportaciones, suelen ser utilizados por gobiernos y organismos internacionales para medir el "progreso".
El concepto del título puede tener muy variables significados, materiales, espirituales, pero estas líneas van a discurrir exclusivamente en el plano físico; vinculado con nuestros cuerpos (aunque no exclusivamente; ya sabemos todo es uno).
Uruguay es un país forjado por su educación pública. Desde sus inicios, la educación ha sido un pilar fundamental en la construcción de la Nación y de una sociedad democrática y equitativa.
“Este balotaje tiene olor a triunfo” decíamos en el artículo que analizaba las elecciones de octubre de este año. ¡Y vaya si tenía olor a triunfo: 140.000 uruguayas y uruguayos dejaron atrás lo que habían votado en octubre y decidieron poner al Frente Amplio a la cabeza del gobierno nacional!
El gobierno del Presidente electo Yamandu Orsi parece tener una impronta muy marcada, que es la búsqueda de un proyecto nacional y terminar o aminorar la grieta política fomentada por una parte muy importante de la derecha uruguaya. No es un objetivo caprichoso, sino que ha sido una actitud constante de la dirección del Frente Amplio en su conjunto desde la derrota de 2019 y un accionar político de Orsi muy coherente en toda su trayectoria política.
En oportunidad de asistir a la Cumbre del Mercosur en Montevideo y estar frente a varios presidentes de la región, en este caso Luiz Inácio Lula da Silva (Brasil), Santiago Peña (Paraguay), Luis Arce (Bolivia), José Raúl Mulino (Panamá), Javier Milei (Argentina) y la representante de la Comisión Europea, Ursula Von Der Leyen, comparto algunas impresiones que surgen de escuchar, razonar y analizar, propuestas, definiciones y la gestualidad típica de los encuentros diplomáticos.
La Importancia del Big Data y la Escucha Social en las Estrategias Políticas
En un mundo donde la tecnología y la comunicación digital dominan el panorama, el Big Data y la escucha social se han convertido en herramientas clave para las campañas políticas. Estas tecnologías permiten a los equipos de campaña recopilar, analizar y actuar sobre datos masivos en tiempo real, ofreciendo una visión precisa de las preferencias, necesidades y preocupaciones de los ciudadanos y ciudadanas.
"Todo el mundo habla de Paz, pero nadie educa para la Paz, la gente educa para la competencia y este es el principio de cualquier guerra. Cuando eduquemos para cooperar y ser solidarios unos con otros, ese dia estaremos elaborando la Paz´". MARIA MONTESSORI (30 agosto 1870 – 6 mayo 1952. Italia)
Acabo de leer una novela. Una novela inquietante y fundamental. También es una película, la pasan por Netflix. Pero, no me voy a detener en la aventura de la adaptación cinematográfica. Prefiero volver a la novela. Definitivamente no es un best seller, tampoco es literatura recreativa, mucho menos un libro de auto ayuda.
En un mundo donde la información fluye a una velocidad vertiginosa, la capacidad de persuadir y argumentar se ha convertido en una habilidad esencial, la retórica - el arte de hablar con elocuencia y persuasión- y la argumentación - la capacidad de presentar razones de manera lógica y coherente- son más relevantes que nunca.