La Radio… arma de supervivencia, combate y espionaje
La comunicación estratégica continuó teniendo un papel relevante a principios del siglo XXI con el comienzo de la Guerra de Iraq.
Dicha etapa marcó un cambio en la forma de hacer la guerra, pasando de la forma tradicional, haciendo uso de los ejércitos, al combate psicológico, en el que la comunicación estratégica se usa como herramienta para influenciar a la opinión pública.
Este cambio fue impulsado por el paso del combate sobre un espacio físico al psicológico y el avance de las nuevas tecnologías y medios de comunicación. Desde entonces la guerra mediática ha tomado un papel muy importante en las últimas guerras y sobre todo en la presente guerra entre Rusia y Ucrania.
Después de que el gobierno de Vladimir Putin bloqueará las páginas de internet de la BBC en su territorio, debido al comienzo de la guerra con Ucrania y la OTAN, la corporación británica decidió transmitir los boletines de noticias en inglés del Servicio Mundial en la frecuencia de onda corta en Ucrania y parte de Rusia, algo que había perdido terreno en los últimos lustros, incluso desmantelando sitios de emisión no solo de la BBC, sino de una gran cantidad de emisoras representativas de ideologías que fueron cayendo y de estados que en algunos casos dejaron de ser tales.
Desde el comienzo de la Guerra de Ucrania, la desinformación y la manipulación de la información junto con la censura y la propaganda por ambos contingentes han sido una de las principales armas de combate para ganar el debate público. Esta situación se vio favorecida por la pérdida de infraestructuras de comunicación
Así mismo, tanto los países de la Unión Europea, a través de sus medios nacionales, como Estados Unidos a través de Radio Free Europe, han sido grandes fuentes de información durante el conflicto con el fin de combatir la desinformación proveniente de Rusia.
En el caso de Rusia, el Kremlin ha llevado a cabo múltiples ciberataques y divulgado masiva propaganda y desinformación a través de los medios Russia Today y Sputni, financiados por el Estado ruso, como respuesta a la información emitida por los medios estadounidenses, europeos y ucranianos.
Durante la Navidad de 2021, los oyentes de la radio pública ucraniana empezaron a oír un mensaje de aviso. El Gobierno les advertía: "¿Cómo puedes escuchar la radio ucraniana si no tienes electricidad? Si hay un accidente en tu ciudad o pueblo o el ejército ruso daña las comunicaciones, la Radio Ucraniana seguirá emitiendo. “Asegúrate de tener a mano un receptor con batería o pilas".
A pesar de la advertencia, muchos ucranianos no hicieron caso. No por inconsciencia, sino porque lo peor siempre parece imposible. Sin embargo, el 24 de febrero sí ocurrió lo peor.
Desatada la invasión de Putin, millones de ucranianos se quedaron sin electricidad, televisión o teléfono. Y en ausencia de todo eso siguieron teniendo la radio. Cuyo uso se multiplicó aquellas semanas.
Bastaba con unas pilas y un receptor. O un coche que aún tuviera batería. O un móvil con radio FM y unos auriculares. Se trataba de intentar estar informados sobre qué ciudades caían y cuáles resistían y hacia dónde se podía huir sin peligro de ser herido o capturado.
Eugenyi Sosnovsky, un fotógrafo de 58 años, y su familia estuvieron a punto de morir por un misil dentro de su propia casa, en Mariupol. Sobrevivieron durante semanas en un sótano, con otros vecinos, pasando hambre, frío, y sobre todo mucho miedo. Hoy lo cuenta desde fuera de aquella ciudad, su ciudad natal. Está fuera porque consiguieron escapar. Y lo lograron, en buena parte, gracias a una radio de onda corta.
En la Mariupol ocupada no hay conexión de teléfono ni de Internet. La única fuente de información es una pequeña radio que, por suerte, empezó a captar las emisora ucraniana en onda corta, ya que estas frecuencias pueden viajar a largas distancias y son escuchadas en radios portátiles de bajo costo.
"El fotógrafo al que hice referencia escuchaba la radio de las Noticias Unidas, y fue realmente un soplo de aire fresco para esa familia y sus vecinos. “Por fin supimos la verdad sobre lo que estaba ocurriendo realmente en Ucrania. Y fue muy importante para nosotros, porque ahí escuchamos la información sobre una inminente evacuación de Mariupol, escuchamos que habría autobuses para los civiles. Que habría autobuses que llevarían a los residentes de Mariupol a Zaporiya. En aquel momento, ya estábamos buscando una oportunidad para marcharnos", cuenta Eugeny.
El uso de ondas electromagnéticas para confundir y seguir a las armas más inteligentes se ha convertido en una parte fundamental del juego que podríamos definir como del gato y el ratón entre Ucrania y Rusia.
Ante esta situación, otros países con perfil beligerante como lo son Estados Unidos, China y otros han tomado debida nota.
Durante el avance de tanques rusos hacia Kiev, en territorio de Ucrania, en febrero del 2022, el Ejército ruso, le hizo honor a su reputación como una de las mejores naciones del mundo en la guerra electrónica. Utilizó en este avance poderosos bloqueadores y misiles señuelo para saturar a las defensas aéreas ucranianas.
Un nuevo elemento de esta guerra moderna han sido los drones casi de uso civil, los que comenzaron a estrellarse en las líneas del frente de Ucrania, sin mayor explicación.
Durante meses, los vehículos aéreos entregados por la empresa tecnológica alemana Quantum Systems le habían funcionado sin problemas al Ejército ucraniano. Estos aparatos surcaban el aire para detectar tanques y soldados enemigos en la guerra que se mantiene por parte de Ucrania y la OTAN contra Rusia. Pero a finales del año pasado, en un cambio abrupto, las máquinas comenzaron a caer del cielo cuando regresaban de algunas misiones.
Para Sven Kruck, ejecutivo de Quantum “Era un misterio”, según comentó tras recibir una carta poco amigable del Ministerio de Defensa de Ucrania en la que le exigían resolver el problema.
Los ingenieros de Quantum lograron identificar el problema, el ejército Rusoi Interfieren las señales inalámbricas de conexión de los drones con los satélites que utilizaban para su navegación, por lo que las máquinas no sabían a dónde ir y se desplomaron.
Radios militares rusas recuperadas, en posición vertical, con una radio verde fabricada por Himera, una empresa ucraniana que fabrica walkie-talkies de 100 dólares resistentes a las interferencias rusas
Para ajustarse a esta situación, Quantum desarrolló el software operado por inteligencia artificial cuya función era actuar como una especie de piloto secundario y añadiendo también una opción manual para que los drones pudieran hacerse aterrizar con un control de Xbox.
La guerra en Ucrania es el primer conflicto reciente entre dos ejércitos poderosos y relativamente avanzados que ha incluido la aplicación de componentes de la guerra electrónica y ha hecho evolucionar las técnicas en tiempo real.
Ahora, soldados de infantería ubicados en el frente, están al tanto de las tecnologías que en otra época sólo conocían expertos capacitados.
Las armas electrónicas no son fácilmente detectables a simple vista. Por lo regular, son antenas parabólicas que pueden instalarse en camiones o instalarse en campos o edificios. El problema es que, una vez instaladas, emiten ondas electromagnéticas para rastrear, engañar y bloquear sensores y vínculos de comunicación que se utilizan para guiar a las armas de precisión y permiten la comunicación por radio.
Prácticamente, todas las tecnologías de comunicaciones emplean señales electromagnéticas, ya sean soldados con radios, drones para conectarse con sus pilotos o misiles para comunicarse con satélites.
Los pilotos ucranianos de drones indicaron que no dejan de afinar sus métodos para esquivar los ataques invisibles. Se sabe que día a día hay una nueva antena y una nueva frecuencia de radio en esta batalla en las ondas de radio.
En el espacio invisible de las ondas electromagnéticas se libra una no menos dramática batalla, en la que se utilizan señales de radio para sobrecargar los vínculos de comunicación con drones y soldados, localizar objetivos y engañar a las armas guiadas.
Pero un detalle no menor, si bien siempre ha existido actividad, pero se ha visto incrementada, es la aparición en la onda corta de señales de radio al servicio del espionaje.
De que trata?. Me refiero a las Emisoras de números….
Las emisoras de números, también denominadas estaciones numéricas, son emisoras de radio de onda corta de origen incierto. En general transmiten voces leyendo secuencias de números, palabras, o letras (a veces utilizando un alfabeto fonético).
Las características de estas emisoras son muy variadas. Algunas siguen horarios estrictos, mientras que otras emiten a momentos aparentemente aleatorios.
Las voces pueden leer números, letras, palabras, tonadas, o código morse.
La voz que lee la información puede ser automática o producida en el momento, de una persona joven o mayor, masculina o femenina.
El uso de distintos idiomas para transmitir la información no necesariamente indica el origen del mensaje; espías franceses, por ejemplo, pueden ser hábiles con los numerales chinos, que se usan sin embargo para enviar un mensaje en francés.
Desde hace mucho se ha especulado [¿quién?], y en un caso acusado, que dichas emisoras funcionan como un método simple e infalible para que las agencias gubernamentales se comuniquen con sus agentes secretos. Según esta teoría, los mensajes vienen cifrados con una libreta de un solo uso, para evitar cualquier posibilidad de descifrar por un enemigo.
En la guerra, son tan importantes las balas como la información: es por ello que todos los estados tienen sus propios servicios de inteligencia, destinados a recopilar información que pueda ayudar a preservar la seguridad de sus respectivas naciones. Aunque la CIA es la agencia más famosa de todas, al igual que el MI5, existen otros muchos servicios que operan en las sombras.
Durante la Guerra Fría - considerada por muchos la edad de oro del espionaje-, los bloques también enfrentaron sus servicios de inteligencia, siendo la KGB soviética un adversario a la altura. Sin embargo, el desmembramiento del estado soviético supuso también la reconversión de este servicio de inteligencia, que se dividió en varias agencias: el Departamento Central de Inteligencia, el Servicio Federal de Protección, el Servicio de Inteligencia Exterior (SVR) y el Servicio Federal de Seguridad (FSB).
Israel en Oriente Medio cuenta con uno de los mejores cuerpos de inteligencia del mundo, el Mossad, que coordina sus actividades con el Shabak, responsable de los asuntos internos de Israel y los territorios palestinos.
No podemos desconocer claro está al MSS, siglas en inglés para Ministerio de Seguridad de Estado- es la agencia de inteligencia del Partido Comunista Chino.
Y un elemento en este Mundo del espionaje y las comunicaciones que tiene su protagonismo es, a pesar de no tratarse de la inteligencia más poderosa del mundo, la Santa Alianza perteneciente al Estado Vaticano y es la agencia más antigua del mundo. Creada por el papa Pio V en 1556, con el objetivo según algunos relatos, de asesinar a la reina Isabel I de Inglaterra. Aunque El Vaticano niega a día de hoy su existencia, la KGB afirmaba que este grupo era más peligroso incluso que la CIA.
Todos y cada uno de estos servicios tienen transmisiones de radio dedicadas al espionaje.
Para cerrar esta recorrida por esta otra cara del mundo de la radio, quiero dejarlos con un caso real de espionaje por radio.
Ana Belén Montes, durante años pasó información clasificada de EE.UU. al gobierno de Fidel Castro. Montes llegó a ser la principal analista dedicada a temas políticos y militares sobre la isla dentro de la Agencia de Inteligencia de Defensa de Estados Unidos (DIA, por sus siglas en inglés), donde desarrolló una exitosa carrera entre 1985 y 2001.
En ese lapso, Montes obtuvo varios ascensos, así como 10 reconocimientos especiales por su trabajo, incluyendo un Certificado de Distinción de Inteligencia Nacional -el tercer galardón más importante en este campo- que le fue entregado en 1997 por el entonces director de la CIA George Tenet.
Martes, jueves y sábados Montes recurría a una radio de onda corta para escuchar una de las llamadas "emisoras de números", una estación radial en la que a las 9 y a las 10 de la noche una voz decía cosas como: "Atención, atención. Tres, Uno, Cuatro, Cinco…". Estos números tenían que ser descifrados a través de una hoja de códigos que los cubanos le habían facilitado y que estaba hecha en un papel que era soluble al agua, con lo que -en caso de urgencia- bastaba lanzarla a un inodoro para hacerla desaparecer como evidencia.
Hasta aquí estos apuntes que tienen la intención de acercarles un mundo para muchos desconocidos.
Será sin dudas el primer artículo de otros sobre aspectos menos conocidos de la radiodifusión y la utilización de las ondas electromagnéticas.
Fuentes consultadas.
Argentina - Infobae
España - Universidad Pontificia Comillas
Reino Unido - BBC