¿Los uruguayos seremos estúpidos?
Todo eso con más de 50 guerras locales, a lo largo y ancho del mundo. Aquí en esta bendita tierra uruguaya, al parecer nos quieren tomar por estúpidos. ¿Lo seremos? Hasta el momento que comenzó a rodar la pelota en Qatar, la idea era pan, eso sí poco, y mucho circo. Pero la cosa salió mal, podemos batir varios récords de no poder meter la pelota en el arco contrario y por lo tanto tener que volver a casita, bastante cabizbajo.
Esto es lo que nos pasó. Por otra parte, ya estamos batiendo récords en tener una oficina para la tramitación paralela de pasaporte, en apariencia legal, pues la misma estaba en la Torre Ejecutiva, casi pegadita a la oficina del presidente y de sus secretarios y nadie sabia ni se enteraron de nada.
Todos están hoy muy asombrados. Esto no eran en el boliche de la esquina, era en casa de gobierno. Pero al parecer NADIE se DIO CUENTA de lo que en el piso 4 sucedía, puesto que a criterio del señor Presidente era un profesional, puesto que no sabía que lo habían investigado más de 30 veces, aunque remitido solo dos, una de ellas con prisión en la cárcel de las Rosas, departamento de Maldonado.
Este personaje llamado Alejandro Astesiano, no lo conocía nadie, por lo menos eso dicen hoy sus colegas o ex colegas, que se están descubriendo sus chanchullos. Él dice: “no hice nada ilegal, todo lo que realice era legal”. Por otro lado, al parecer otro personaje del gobierno, gritón y autoritario, dice que el Frente con sus denuncias lo que quiere es “desestabilizar el gobierno”.
Hace ya varios días, tomando un café en un bar de la ciudad vieja, veía a tres personas sentadas, a mi costado. Ellos, al parecer almorzando cuando uno le decía a otro, "sabes el problema es que estamos como Peñarol, ligamos mal". "¿Lo qué?" Dice uno de ellos. "SI Uruguay hubiera ganado el primer partido, otro gallo cantaría, pues la gente es futbolera y se olvida. Pero perdimos y esto puede ser nefasto, la gente está caliente”.
Esto me lo contaba una persona amiga que escuchaba a tres parroquianos en un bar. El tema puede ser muy cierto. Pero la gran pregunta es: ¿Nos creerán tan estúpidos? O seguirá funcionando aquello de “pan y circo”. Hoy ya está en boca de altos funcionarios del gobierno frases como “que el gobierno se está comiendo un garrón”. “El Frente Amplio quiere desestabilizar al gobierno”. Seguro que todas estas barbaridades y muchas más son dichas por algunos personajes multicolor y otros al parecer han bajado la cabeza como el avestruz.
En el caso de espionaje a diferentes legisladores, se vuelve “casi” a repetir lo ocurrido en el gobierno de Lacalle, con el espionaje desde la Galería Caubarrere, donde se encontraba al frente de dicho espionaje, un coronel del ejército según se dijo en aquel entonces, contra ciudadanos de la sociedad civil. ¿Esto lo recordaba el senador Manini Ríos, cuando se refería que había ya sucedido cosas horribles, desde el advenimiento de la Democracia? Bien podría ser esto o algo que no nos enteramos.
Por eso se puede decir que pensamos luego de razonar que, esta asociación para delinquir, jamás se podría realizar con un tipo, al decir de muchos, “un bocón” como lo es Astesiano, ¿Pero lo es? Cuántos altos mandos de la policía están embarrados con estos hechos? Cuando muchos esperaban que esto se fuera olvidando poco a poco, con cada amanecer aparece algo nuevo, como si una mano negra muy sucia quisiera embarrar más la cancha. Un título muy interesante, de un articulo publicado por VTV Noticias es: “el caso Astesiano crece día a día”. Otra gran pregunta del pueblo quiere saber es: ¿a la fiscal que lleva este caso, se la está presionando de muchas maneras? ¿será para que se canse y abandone el caso? Aunque luego de conocerse aquello de que “te doy voluntariamente mi celular, pero borro todo los que dice y hablo en privado con mi custodio, para proteger a mi familia y a mí” dijo el presidente, cosa que la fiscal, al perecer aceptó, pero no aceptó, pero si aceptó. Aunque ahora dice que nadie dijo lo que se dijo, pero no dijo, y si dijo que recordaran de que somos todos iguales ante la ley.
Aunque yo no leí bien iguales a quien, a los de la Operación Océano, o de aquel robo de dos gallinas. Porque según dijo la fiscal Gabriela Fossati "aquí nadie tiene corinita”, ¿será porque no somos un país con un rey? Porque hace dos meses (5 de Oct.) pidió a la policía científica que recuperara todos los mensajes y videos borrados por Astesiano menos los intercambiados con el sr. Presidente. Hoy dos meses después, la fiscal Fossati cambió el Trole. El tema es ¿Por qué? Eso podría ser una de las una de las grandes preguntas. El vecino, el de a pie, hoy se pregunta ¿quién manda en la Torre Ejecutiva? ¿Quién resolvió que antes NO y ahora sí?. Otra gran pregunta es: si al sistema de vigilancia El Guardian los manejan o tienen acceso unos 482 policías, ¿Cuántos son “amigos” de Astesiano?
Con la dictadura cívico-militar se nos impuso “la dictadura del silencio”, hoy se nos está imponiendo la dictadura de la mentira y de verdades a medias. Nos quieren imponer aquello de "calle la boca" porque desestabilizas la democracia y podés despertar locas pasiones en “las yerbas”, que tienen las armas. El pueblo tiene que decir lo que realmente piensa, pues las marchas y contramarchas van demasiado rápido y casi estamos al borde del precipicio. Según el secretario del presidente, Delgado “es desproporcionado, irresponsable, desestabilizador y peligroso”. Pedirle la renuncia al presidente, Entonces la pregunta sería: ¿tapamos todo barremos debajo de la alfombra? Otro que al parecer revivió o pretende revivir es el presidente del honorable directorio del partido nacional Pablo Iturralde, que quiere dialogar con el frente Amplio, porque si no dialoga le hace un mal al país.
Nos quedaron varios temas. El pasaporte express, al narco traficante uruguayo requerido por la DEA y la policía paraguaya, que estaba preso en Dubái y al parecer pago unos 100 mil dólares. Nos quedó hablar de la valija diplomática con el pescado de papel, ¿Cuántos verdes había allí? Nos quedó en el tintero la acusación a los parlamentarios sobre la seguridad, que ya va quedando en el olvido al igual que la Operación Océano y el gran baile de los blancos con festejo y violación incluido de una jovencita de 16 años, que denunció su padre. ¿Qué pasó?
Después la seguimos.
WILLIAM MARINO