Durante la sesión en la que se aprobó el gravamen transitorio para los salarios públicos más altos, la senadora nacionalista Graciela Bianchi había afirmado que el "hambre es no tener qué comer" y que en Uruguay "todos los hogares, por acción del Estado y por acción de la sociedad civil, reciben la comida diaria".

Luego de estas declaraciones, en las últimas horas se conoció un nuevo reporte de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) donde los datos muestran que la inseguridad alimentaria grave en Uruguay se ubica en 6,4% y la inseguridad alimentaria moderada en 23,2%. Asimismo, el Observatorio del Derecho a la Alimentación de la Escuela de Nutrición de la Udelar, emitió un comunicado donde indica que en Sudamérica estas cifras alcanzan al 7,7% y 29,4% de las personas, respectivamente.

El Observatorio integra una red en América Latina y el Caribe con más de 70 universidades de 17 países de la región, respondió a dichas declaraciones. "Determinar la cantidad de uruguayos que padecen hambre e inseguridad alimentaria solo acepta el uso de instrumentos validados, que mucho distan de visiones parcializadas, subjetivas y limitadas", objetó en referencia a los dichos de la Bianchi.

"En un país donde la disponibilidad de alimentos está asegurada, que la sociedad civil tenga que sostener la alimentación de miles de uruguayos evidencia la grave situación de injusticia alimentaria y violación del derecho de todo ciudadano de elegir libremente cómo, cuándo y con qué alimentarse", agregaron.

En este sentido, explicaron que l porcentaje de personas que se encuentra en una situación de inseguridad grave o moderada (29,6%) "da cuenta que la voluntad y el accionar político no han sido suficientes para construir instrumentos que faciliten o favorezcan un acceso justo y sostenible a los medios de vida, que se necesitan para producir o adquirir los alimentos".

Cabe destacar que el comunicado el Observatorio reconoce las acciones del Estado y de la sociedad civil para asegurar el acceso a alimentos, aunque plantea de que es inaceptable afirmar que no existen personas padeciendo hambre. "Negar la situación que hoy sufren muchas uruguayos y uruguayas, es una irresponsabilidad que atenta contra las obligaciones que el Estado debe cumplir para garantizar el derecho a una Alimentación Adecuada", sentencia el texto.